REVOLUCIÓN EN NEUROCIENCIA: DESCUBREN QUE LA MEMORIA NO SOLO RESIDE EN EL CEREBRO CON LA TERAPIA DE REGENERACIÓN CELULAR A BASE DE INDUCTORES SE PUEDEN ACTIVAR LOS RECUERDOS CELULARES
Ciudad de México.- Un estudio revolucionario publicado en Nature Communications ha revelado que los recuerdos no solo residen en el cerebro, sino también en otras células del cuerpo humano. Este hallazgo sugiere que la capacidad de almacenar y procesar información podría ser un fenómeno compartido por todas las células del cuerpo.
Los científicos lograron replicar uno de los principios más fundamentales de la formación de memoria, el llamado «efecto de espaciado» o massed-spaced effect, en dos tipos de células humanas no neuronales. Este descubrimiento demostró que estas células podían «recordar» y responder de forma diferente cuando los estímulos se aplicaban de manera intermitente en lugar de continua.
Este avance da fascinantes posibilidades para la medicina y la biotecnología. Entender cómo funcionan estos «recuerdos celulares» demuestra como sí puede haber tratamientos y terapias innovadoras para abordar problemas de aprendizaje y trastornos de la memoria.
El hallazgo plantea interrogantes interesantes sobre otros órganos. Por ejemplo, ¿podría el páncreas «recordar» patrones de alimentación para regular el azúcar en sangre de forma más eficiente? ¿Podrían las células renales regenerarse si son estimuladas de manera adecuada?
El doctor y científico mexicano Gerardo Martín González López, descubridor de la Terapia de Regeneración Celular a Base de Inductores, ya había mencionado esta capacidad de «memoria celular» en sus conferencias. “Eso de ver que las células pueden tener memoria ya lo habíamos dicho en diversas ocasiones, que las células del cuerpo son inteligentes, claro que tienen memoria. Tan está demostrado esto que las células madre, cuando reciben la terapia de regeneración celular a base de inductores, vuelven a responder como lo hicieron durante la tercera semana de gestación”.
Durante sus conferencias y publicaciones, el Dr. González López ha mencionado que todas las células que dejan de producir las moléculas necesarias para mantener su estructura y funcionalidad lo hacen porque han perdido a las células madre que envían estas órdenes. Las células que se malignizan o enferman y dejan de funcionar llegan a ese estado porque las células madre se van «durmiendo» y dejan de controlar su epigenética y los genes de las células hijas.
Esta investigación demuestra que, si las células siguen recibiendo las moléculas correctas administradas con la terapia a base de inductores y las señales de las células madre, pueden seguir trabajando de manera natural y equilibrada como un sistema complejo. Cuando faltan células madre, dejan de producir estas moléculas, lo que puede llevar a enfermedades como el Alzheimer o la incapacidad de regenerar los riñones, por ejemplo.
El hallazgo reafirma que las células tienen memoria propia. Incluso las células renales, que se creía que no podían regenerarse, pueden volver a activar sus genes y funcionar correctamente si son expuestas a las moléculas inductoras para volver a producir células nefronas. Las células madre, cuando vuelven a recibir las mismas moléculas que tuvieron durante la tercera semana de gestación, pueden multiplicarse y formar nuevas células funcionales.
Con la Terapia de Regeneración Celular a Base de Inductores desarrollada por el Dr. González López, esto es posible. Cualquier célula del cuerpo puede responder correctamente y, con sus recuerdos celulares, activar la regeneración. Esto puede permitir que el paciente tenga una mejor calidad de vida, una ralentización de su enfermedad e incluso llegar a la remisión.