09/11/2025

DR. SERGUEY IVAN FARRERA VILLATORO: «LA NEUROCISTICERCOSIS, UNA ENFERMEDAD SILENCIOSA QUE PUEDE CAUSAR EPILEPSIA»

0
WhatsApp Image 2025-11-08 at 19.37.51

México. – Desde Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, el Dr. Serguey Iván Farrera Villatoro —médico neurofisiólogo, Doctor Honoris Causa en Ciencias Médicas, Neurología y Educación, y fundador de Neurodiagnóstico— comparte en Preventiva Salud una profunda reflexión sobre la neurocisticercosis (NCC), enfermedad parasitaria que, a más de cinco siglos de su identificación, continúa siendo una de las principales causas de epilepsia de debut tardío en el mundo.


Conocida como “la gran imitadora” por su capacidad de simular múltiples patologías neurológicas, la NCC representa un reto diagnóstico y terapéutico que trasciende fronteras y contextos socioeconómicos. Su persistencia, como señala el propio autor citando a los doctores Carlos Larralde y Aline Schunemann de Aluja, “no es por lo que no se sabe, es por lo que no se hace”.


El artículo advierte que las pruebas inmunológicas, además de costosas, tienen una sensibilidad limitada (alrededor del 40%). Por ello, el diagnóstico certero debe apoyarse en tomografía axial computarizada (TAC), electroencefalograma digital con mapeo cerebral (Q-EEG), historia clínica detallada y criterios epidemiológicos. Aunque algunos optan por la resonancia magnética, esta no está indicada en la mayoría de los casos, ya que no revela las calcificaciones típicas del cisticerco, lo que puede llevar a confundir la NCC con tumores cerebrales. La TAC simple y contrastada, en conjunto con el Q-EEG, permite identificar con claridad la presencia de neurocisticercosis y desmontar su fama como “la gran simuladora” de otras enfermedades neurológicas.


El tratamiento propuesto por el Dr. Farrera Villatoro es eficaz y de bajo costo. Consiste en la administración de un antiepiléptico, un desparasitante en megadosis (Albendazol, Prazicuantel o Ivermectina) y un corticoesteroide. Se aplica en dos ciclos de dos semanas, con un descanso intermedio para desintoxicación. Durante las primeras semanas se recomienda reposo relativo, y el antiepiléptico debe mantenerse entre 4 y 6 meses posteriores al tratamiento, debido a los focos cálcicos residuales que pueden generar epilepsia focal.


La Taenia solium, parásito causante de la NCC, se transmite entre humanos y cerdos, incluso entre individuos de la misma especie. El cerdo, al consumir materia fecal humana contaminada, se infesta y transmite el parásito a través de su carne. El cisticerco puede sobrevivir hasta mes y medio en embutidos como chicharrón, incluso a temperaturas de hasta 400 °C, lo que lo convierte en un riesgo invisible en productos como chorizo, butifarra y fiambres salados. Según datos citados por el Dr. Farrera Villatoro, el 40% de la carne de cerdo consumida en México proviene de criaderos de traspatio sin regulación sanitaria, lo que favorece la propagación de la enfermedad. La NCC ya no se limita a contextos rurales o de pobreza: es una neuroinfección cosmopolita que puede estar presente incluso en restaurantes de alta gama.


Una vez instalada en el cerebro, el cisticerco puede vivir hasta 30 años, provocando síntomas como epilepsia, cefaleas, alucinaciones, trastornos del habla y del movimiento. Su evolución pasa por fases vesicular, coloidal, granulomatosa y cálcica, y su degradación puede generar inflamación cerebral que, en algunos casos, se confunde con tumores. El artículo subraya que no todas las personas que consumen carne infestada desarrollan la enfermedad, pero quien ya ha sido infectado puede volver a parasitarse múltiples veces, ya que no se genera inmunidad.


Este trabajo ha sido presentado por el Dr. Farrera Villatoro en congresos internacionales como IOCIM (Mérida, 2017), SIISDET (Colombia, 2018), en el campus de medicina de la UDABOL (Bolivia), y en la Academia Nacional de Historia y Geografía con el patrocinio de la UNAM (2020). Su investigación ha contribuido a abrir nuevas líneas de estudio, desmitificar la enfermedad y promover el diagnóstico oportuno.


La publicación del Dr. Serguey Iván Farrera Villatoro reafirma la urgencia de abordar esta enfermedad con rigor diagnóstico, acción preventiva y educación sanitaria, desde la medicina familiar hasta la política pública.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.